Pasamos un rato agradable en este hotel tradicional de Château-du-Loir. La habitación que nos dieron era de buen tamaño, y contaba con cama cómoda, cuarto de baño independiente y refrigerador. El personal era en realidad muy profesional, lo mejor de nuestro viaje. Y es que estábamos en un lugar tranquilo y cómodo a una distancia media de Manoir de Riablay. Se estaba muy bien, fuimos al centro de la ciudad a unos pasos del hotel.

Las camas eran súper cómodas, y había un televisor de pantalla plana, un refrigerador minibar y una mesa de trabajo en la habitación. El desayuno era delicioso, había una cantidad enorme de platos. Ubicación: el hotel estaba no muy lejos del centro de la ciudad, también de la plaza central.

Nos encantó la ubicación del hotel, perfecto para los que les gusta salir por las noches. Además, la habitación era espaciosa y tenía una bañera, lo cual fue genial para relajarnos después de un largo día. disfrutamos de la terraza, donde pudimos disfrutar de un buen momento al aire libre.

Tuvimos que hacernos el servicio porque el personal no trabajaba ciertos días, lo cual fue un poco incómodo.

Una ubicación realmente encantadora y fantástica al lado de un buen restaurante, fácil para visitar lugares. Otra cosa, estaba super cerca del centro y también de lugares de interés turístico. Había un bar bonito y en el restaurante exterior se servía una comida muy rica...

La propiedad era bien organizada, nos ha encantado este lugar.

Habitaciones de buen tamaño con un baño independiente, aire acondicionado y también un dormitorio, el personal era muy agradable. La comida del desayuno estaba exquisita. Ubicación excelente - a poca distancia a pie de todos los lugares que necesitábamos.

Ubicación ideal del hotel

Terraza muy agradable. Edificio bonito.- Habitación con bañera

Ningún fallo.